marzo 19, 2011

Escoria Cerebral.

Qué irónico es que vivamos sentados en el sillón, mirando la televisión, mientras otros se están matando como animales en una guerra de la que ellos mismos desconocen la causa. Total, son solo un montón de desconocidos muriendo a través de la pantalla de tu plasma, ¿verdad? Un entretenimiento macabro y sangriento de seres que para nosotros no son nadie, como una película basada en hechos reales.

¿De qué igualdad estamos hablando? ¿A qué nos referimos cuando decimos que somos todos iguales si después nos chupa un huevo el niño que se está muriendo de hambre solo porque vino a nacer donde no debía? ¿Quién nos robó la razón y el corazón? ¿Quién nos enseñó que ser hipócrita era lo correcto? ¿Quién dijo que no se está pudriendo todo lentamente y nos enseñó a sonreír por la vida mientras todo funciona patas arriba? ¿Y quién escucha a los débiles cuando tienen necesidades?

Haití fue pura prensa, los mineros también. Ni hablar de la AH1N1 o el dengue, o Japón o el terremoto en Chile. Es todo un comercio, una historia que nos quieren vender a través de los medios de comunicación. ¿Por qué creen que Japón estuvo más de dos semanas en televisión como noticia principal? ¿Porque les importa? ERROR. Es porque vende, les da audiencia, y no se imaginan cuánta. El diario se vende como pan caliente y todo el mundo está prendido a la televisión. Eso es lo que le da la plata para sus viajes a New York a los burgueses que dominan los medios. Es lo que nosotros compramos, por tanto, lo que les facilitamos a ellos es nuestra ignorancia en forma de cheque. Es casi imposible de creer que alguien pueda ser tan cruel como para sacar provecho de algo así, aunque para ser sincera, no me sorprende tanto; tienen la cabeza podrida por la plata.

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