Keep Calm and Eat Chocolate

De vuelta a la realidad.

Bueno, el martes empiezo nuevamente la jornada de tortura anual en el infierno, que se nos proporciona como una supuesta oportunidad. ¿Qué raro no? Que mi padre se pase sudando todo el mes trabajando en el medio del campo (es broma, no que no lo aprecie ni nada de eso) para que a mí me torturen con esas cosas en idioma extraterrestre (de El País de las Maravillas, más específicamente, donde estaban todos más fumados que Bob Marley) que escribe la profesora de matemática en el pizarrón y pretende que yo descifre. Díganme, ¿cómo uno logra descifrar algo en un idioma que desconoce? ¡Es como si nos pusieran a traducir del polaco!

Lo bueno es que voy a volver a ver a mis amigos y voy a tener clase de Idioma Español, que aunque a veces me duerma porque la Moni Laviano habla como si la hubieran sedado con un calmante para caballos, me encanta porque puedo escribir historias, que es lo que más amo hacer en esta vida.

Sí, pretendo convertirme en algo así como la futura versión femenina de Roy Berocay, quien tiene la vida perfecta para mí: es escritor y tiene una banda de rock xD

Nos vemos (o no) cuando conquiste el mundo junto a mis socios Pinky y Cerebro :) Muchos besos desde mi planeta mutante :D