El perro crecía y crecía hasta medir ocho metros y arrancaba el portón de hierro con la mandíbula. Yo estaba sentada enfrente, en el escaloncito de la puerta de una casa, escuchando When I Come Around de Green Day y entonces lo vi. Me subí a su lomo y le golpeé el cuello. No se si lo sintió, pero movió torpemente el cuello y tiró el portón lejos. Corrió a buscarlo conmigo sobre su lomo, y cuando lo tomó con los dientes me lo dio y yo lo tiré aún más lejos. ¡Tenía superfuerza! Corríamos y corríamos por las calles de San José y no me importaba la gente que miraba incrédula a la adolescente con una remera de Dookie que montaba un perro gigante.
Y sí, todo esto lo imaginaba mientras oía un perro ladrar al otro lado de la calle tras un portón, en San José, y me preguntaba cuál sería su aspecto. ¿Mutante? ¿Quién? xD
Rebellious Punky
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